A quien no le gusta una ciudad llena de árboles o áreas verdes. Dichas áreas son clave para mejorar el modo de vida de la población, ya sea por los grandes beneficios que otorga el arbolado urbano o arbolado público como queramos mencionarlo o simplemente para hacerlo parte de nuestro entorno, disfrutándolo con un paseo, pero como todo necesita mantenimiento, por ello la poda de arboles y hasta el derribo de arboles se convierten en un tema, tanto ecológico como administrativo por ejemplo en la CDMX hay que solicitar el “ permiso para poda de arboles ” por ello decidimos preocuparnos y ocuparnos de este importante tema.
Entre sus funciones más reconocidas del arbolado urbano, además de la producción de oxígeno, destacan: brindar sombra y refrescar el aire circundante, regular la humedad ambiental, disminuir ruidos, atenuar los vientos, retener partículas sólidas (hollín y polvo), embellecer las vías de tránsito y las viviendas y moderar la erosión de suelos y escurrimiento, entre otras. En las ciudades los espacios verdes y fundamentalmente el arbolado constituyen muchas veces el único contacto de la población con la naturaleza y los únicos hábitats disponibles para la fauna.
Pero que pasa cuando este comienza a tener problemas, las razones pueden ser diversas debido a estas el arbolado sufrirá alguna modificación. Aunque lo óptimo sería que al instalarse la infraestructura de nuestras ciudades se considerara el cuidado y manejo del arbolado, eligiendo las especies adecuadas, cableando de forma adecuada la calle, en el cual hubiera arbustos o árboles pequeños y en el otro lado de la acera utilizar árboles más altos, intercalando las luminarias con árboles pequeños o arbustos.
Esta actividad tiene como objetivo adecuar y mantener la forma natural del árbol a su entorno, con ella se logra: restablecer el equilibrio entre el sistema de raíces y la parte aérea de la planta, mantenimiento de la forma y sanidad del árbol y adecuar la copa al tránsito vehicular y peatonal, al cableado aéreo, a la iluminación de calles y en general a la infraestructura existente en las zonas urbanas. Algunas de las razones por la cual se toma este tipo de decisión son:
- Ataque de organismos oportunistas: Causan enfermedades en los arboles
- Podas de saneamiento: Aplica para el retiro de ramas muertas o vivas que para minimizar daños al árbol.
- Podas estéticas: Método artístico y técnico que influirá en la belleza de la especie vegetal.
- Poda de seguridad: Este tipo de poda es la más preocupante y debe ser impostergable por los altos riesgos que representa. Esta poda se aplica a ramas muy bajas que obstruyan la visibilidad, ramas colgadas o inclinadas sobre techos, cables conductores, banquetas, camellones, arroyo vehicular; ramas tapando señales de tránsito o tapando la visibilidad de un inmueble y también se aplica a las ramas superiores de la copa para que no alcancen las líneas de energía eléctrica.
- Podas en arboles adultos: Podas de formación, más que estructurales, para mantenerse libres de ramas secas, muy pesadas y aligerar su copa para que filtre el aire mejor y penetre más luz a la copa, para que mantenga su crecimiento continuo.
- Poda de elevación de copa: Este tipo de poda también es conocida como poda basal de la copa y se aplica en árboles y arbustos desde jóvenes, sobre todo en aquellas especies que tienen la tendencia a emitir brotes en el tronco, con la finalidad de mantener limpio el fuste.
- Poda de reducción de copa: Utilizada en los arboles adultos que compiten por la luz solar y espacio
- Crecimiento invasivo de raíces: Aplica para los arboles que rompen la banqueta ocasionando problemas con las vías de transito
Las circunstancias pueden ser muchas, pero si tienes dudas podemos ayudarte a resolver el problema, somos Ing. Agrónomos especialistas en la poda y derribo de arboles en la CDMX .